Cecilia Llambí, Andrés Rius, Paula Carrasco, Fedora Carbajal y Paola Cazulo.
La promoción de inversiones mediante incentivos tributarios ha sido un componente clave en la estrategia de los dos últimos gobiernos para favorecer la acumulación de capacidades productivas. Un mecanismo de política pública, como el establecido por el Régimen de Promoción de Inversiones (Decreto 455/007) plantea inevitablemente preguntas sobre su efectividad (capacidad de alcanzar los objetivos buscados), sobre su eficiencia (capacidad de alcanzar los objetivos con el mínimo de recursos y distorsiones a otras políticas prioritarias) y sobre su generación de efectos no previstos. En este trabajo se estima el efecto de los beneficios tributarios del RPI sobre los flujos de inversión, el empleo, las exportaciones y la productividad laboral. Se utiliza Diferencias en Diferencias Emparejadas sobre datos de panel de empresas contribuyentes de IRAE a la DGI durante el periodo 2005 a 2011. Los resultados muestran un efecto positivo y significativo del RPI sobre la inversión, las exportaciones y el empleo. El efecto sobre la inversión es creciente hasta los primeros tres años de implementación y luego decreciente. El efecto sobre el empleo es creciente y persistente en los primeros cinco años de implementación. El efecto sobre las exportaciones es creciente hasta el tercer año de la implementación. No se encontraron efectos positivos sobre la productividad laboral.