En mayo, el IPC aumentó el 0,11%, sustancialmente por debajo de la proyección de cinve del 0,19%, con ello la variación interanual del IPC fue del 5,4%.
Las proyecciones de cinve indican que la inflación del mes de junio de 2025 se ubicará en el 0,24% y el crecimiento interanual de los precios en esta oportunidad será del 4,8%, la cifra más cercana a la magnitud objetivo establecida por el BCU en lo que resta de 2025 y 2026. Durante 2025, se espera que la inflación continúe oscilando algo por encima del 4,5%, en tanto que se puede esperar que la brecha respecto a la meta se amplíe en el transcurso del año 2026.
En esta oportunidad, es destacable el aumento de la incertidumbre producto de los últimos acontecimientos internacionales. Los riesgos provenientes de los conflictos bélicos y geopolíticos, especialmente el nuevo frente que se ha abierto en el conflicto en Medio Oriente, que se agrega a los conflictos previos en la zona que aún siguen encendidos y a la continuidad del enfrentamiento bélico entre Ucrania y Rusia. Este escenario ha exacerbado riesgos a escala global e impone cautela respecto a la evolución de los precios en el transcurso de los próximos meses, fundamentalmente por el impacto que estas escaladas puedan tener en precios de commodities claves para Uruguay como el precio del petróleo. Estas novedades han reducido el protagonismo de otro de los riesgos que mantiene su potencial negativo como las restricciones al comercio que puedan finalmente concretarse como producto de la política de aumento de aranceles que viene impulsando el presidente Trump.